Mi palacio de cristal, donde nada aquí es real

"Poco a poco está cayendo mi palacio de cristal,

Por favor alejate que hay escombros en la ciudad

Una risa ya no anima, hoy sólo quiero escapar

Despeja el área, no se acerquen

Harán su trabajo los guardias de mi ciudad

Todo es ficticio, nada aquí es real~

El agua turbia, espejos rotos y un miasma de frialdad

Mis manos duelen, hay heridas que no podrán sanar

Corre muy lejos, está perdida esta ciudad

Yo no puedo escapar

Está perdida mi ciudad

Se está rompiendo mi ciudad

Mil pedazos van cayendo de ese gran cristal

Está perdida mi ciudad

Se está rompiendo mi ciudad

No toques nada pues te puedes dañar

Despeja el área no se acerquen a mi palacio de cristal

Nada aquí es real."

Bueno y luego de tanta cursilería y saliendo un poco del estilo narrativo común del blog hoy me he decidido a compartirles todo lo que he hecho a lo largo de la semana.

Los fines de semana son siempre muy lindos, ¿no les parece? Siempre hay algo nuevo que hacer, sobretodo si se cuenta con amigos como los míos, juraría incluso que tienen magia y es que siempre pueden animarme y bueno, este sábado a Matt se le ocurrió que todos podrían venir a mi casa, estuvimos viendo un maratón de una serie ¡e inclusive hemos cocinado juntos! Había olvidado lo bueno que era él haciéndolo, es un gran chef, compramos todos un montón de dulces en la tienda de la esquina y hemos hecho un postre juntándolo todo, aunque todos ayudamos fue básicamente Matt quien tuvo la idea de como organizar cada cosa para que tuviera un papel perfecto en nuestro pequeño bocadillo, si hay algo que admiro mucho de él es la creatividad que tiene para tomar un montón de objetos sin aparente relación y unirlos todos para hacer algo único, parece que siempre tiene una buena respuesta a todo y sabe que hacer incluso con los pedazos rotos de algo, es alguien increíble. Esa misma tarde también decidimos ir al café (si, quizá nos den caries por tantos dulces) hemos pasado un buen rato allí, no comí mucho, Zafiro se ha emberrinchado y ha insistido en comer la parte de todos, pero en realidad no me molesto, de hecho me parecía adorable la forma en que lucían sus mejillas cuando se llenó la boca de pastel de chocolate ¡parecía una ardilla! Todos regresamos a mi casa después de eso y hemos preparado chocolate caliente para cenar, incluso tuvimos una especie de pijamada y al final casi me han tirado de la cama.

El domingo por la mañana desperté algo acalambrado por el poco espacio que tenía, pero a la vez me sentía muy bien porque parece que dormí toda la noche abrazando a alguien muy especial para mí y cuando desperté el aún me tenía todo apretado en sus brazos, era un gesto muy cálido a decir verdad, me hacía sentir seguro sólo por el hecho de estar allí y es que confieso que aunque antes llegué a ver a Matt como una pareja ahora lo veo más como un hermano con el que puedo contar y el cual estoy dispuesto a ayudar también cuando se sienta desanimado, aunque también es un poco confuso el como Michelle también forma parte de esto, pero él es más el hermano molesto, el que siempre está molestando pero al cual de igual modo quiero, es muy divertido y me sube los ánimos con sus bromas estúpidas, no es el mejor expresándose con nosotros pero siempre puede robarnos una sonrisa de igual modo; por otro lado veo a Zafiro como nuestra hermana menor y a alguien a quien intentamos cuidar, pero claro que ella también tiene lo suyo, a pesar de que parece ser la más vulnerable ella también es muy comprensiva, amo poder abrazarla, pienso que su afecto es muy sincero y puro siempre, ¡claro! ¡el de los tres lo es! Pero ella especialmente me causa ternura, es muy delicada en el buen sentido de la palabra, la considero una razón más para luchar, quiero luchar por esa sonrisa tímida que muestra siempre, por poder tocar de nuevo su suave rostro y brindarle un poco de seguridad, quiero protegerla. Y de nuevo dejando mis cursilerías de lado seguiré contando lo que hicimos ese día, nos quedamos hasta tarde en la cama peleandonos un poco hasta que Michelle se levanto porque tenía que hacer pipí, ya eran casi las 4:00pm. Fue un día muy bueno, hemos pasado charlando toda la tarde. Me gusta mucho la forma en que Matt revuelve mi cabello, tengo un poco de amor-odio con esa sensación, a Michelle le tengo más que prohibido hacer eso, porque me molesta aveces como me trata o toca a pesar de saber que nunca tiene malas intenciones creo que aveces es demasiado empalagoso, pero me siento tranquilo de que Matt lo haga, supongo que quizá sea porque tengo una mayor afinidad a él. Me gustaba como estaba jugando con mi cabello cuando yo estaba comiendo una torta en la cocina, nunca he tenido a un hermano mayor pero sentía como si el lo fuera y estuviera intentando hacerme un poco feliz. Rojo me mando una carta, debí ignorarla.

El lunes como de costumbre he ido a la escuela, Matt y Zafiro suelen acompañarme cuando tomo el transporte público, Michelle prefiere ir en su motocicleta, aunque aveces la toma Matt; Zafiro odia que haga tanto viento cuando la usa así que prefiere los vehículos cerrados, aveces se molesta conmigo porque necesito llevar siempre la ventana del camión abierta, dice que le seca los ojos pero yo amo la sensación del viento chocando en mi cara, por eso prefiere ir en un asiento opuesto o delante del mío. No ha sido muy relevante lo que sucedió en la escuela, Zafiro tenía una manta y la hemos usado para similar que tuvimos un picnic en el receso. Nada especial transcurrió esa tarde, había muchos deberes. Rojo estuvo viendo todo el tiempo, tiene envidia del tiempo que paso con ellos.

El martes fue bastante similar, sólo que saliendo de la escuela nos hemos ido a jugar con unas pistolas de agua a la casa de Zafiro, ya que el día era realmente caluroso ¡es genial poder jugar con ellos! Al final hemos terminando todos peleando en el pasto y estuve molestando a Michelle con cosquillas. Rojo nos arrojó un globo desde el otro lado de la cerca, tenía un líquido viscoso adentro en lugar de agua, es la peor.

El miércoles ha sido realmente un poco cansado, pero igual aprecié su compañía y el hecho de que estuvieran allí tratando de animarme. Dormí mucho esa tarde, Matt estuvo todo el rato conmigo y me acariciaba el cabello mientras dormía, eso realmente me relajó.  Rojo esperaba en la cocina, tenía una manzana podrida.

El jueves recibí un balonazo fuerte en la cara mientras jugaba basquet ball con los chicos, se nos ha ido el balón y Rojo lo ha tomado, yo realmente la odio. Aún así por la tarde salí a dar un paseo, me sentía muy inseguro pero ellos me animaron todo el tiempo y estuvimos gritando por la calle, Zafiro lucía bastante bonita ese día y estuve cantando con ella, inventabamos canciones de todo lo que veíamos, eran realmente malas pero igual me hacían sentir bastante libre, al final hemos terminado presentándonos en una plaza llena de niños, sus padres nos miraban muy raro.

El viernes era el día que yo supuestamente iba a publicar esta entrada, pero nada aquí es real, todos los días anteriores me los he inventado porque quería escaparme de mi realidad, me está ahogando, realmente me siento sin fuerzas e intenté escribir lo que estuvo sucediendo en realidad durante estos últimos días, pero ¿qué pasó? Me quebré, me quebré mientras relataba el segundo, me gusta escribir a sumo detalle lo que considero relevante y mientras describía los sentimientos que había tenido esos días lo sentí tan fresco, tan vivido que volví a llorar, realmente quiero olvidarme de todo eso, es muy patético de mi parte haber llenado esto con cosas que yo inventé ahora mismo, pero ¿saben? Se siente mucho mejor, me sentí realmente bien al escribirlo, necesitaba un escape y este lo era, ahora quiero llorar otra vez por tener que volver a la realidad. La odio, he experimentado mucha disforia de género los últimos días y de forma fuerte, ¡si de por si le encontraba mal antes de esto! Realmente me volvió a meter en una crisis el recordarlo, mi peso sigue bajando, no puedo dormir bien y eso es una tortura, necesito poder escapar de esto, olvidar todo y sentirme del todo bien por un sólo momento; pero no, no puedo, ya ni siquiera puedo dormir para escapar de ello y creo que eso me ha tenido más alterado. Absolutamente todo lo que hago parecen ser decisiones erróneas, estoy muy asustado y muy confundido, por eso quise refugiarme en la otra realidad, el mundo de esponja donde nadie sufre ni los puedo cortar, pero no, incluso allí no estoy a salvo, vuelve a entrar y ahora realmente creo que nada de lo que escribí podría tener sentido. Me duele el pecho, quiero terminar con esto pero inclusive eso me daría culpa ahora "Si tú te quiebras yo lo voy a hacer también" ¿qué hago entonces? Cada cosa que haga va a dañar a quien esté cerca, no tengo ninguna salida, no puedo verla. Desearía nunca haber existido, desearía no sentir nada, desearía poder huir, desearía no ser tan cobarde, desearía no ser yo, desearía no ser alguien podrido, desearía no estar muriendo y de la peor forma posible, desearía no ser yo.

:D y bueno, queridos, aquí termina mi divertida narrativa sobre como es vivir una semana en mis zapatos, aunque igual supongo que podría variar si algunas semanas uso tenis o botas, ¿pero eso que más da?